Soy la flor oscurecida por los humos del carro de combate.
Soy la metralleta temblorosa en manos que caminan con el miedo.
Soy el cielo llorando las lágrimas de la familia humana.
Soy el militar en el campo yermo buscando más medallas con los ojos cerrados.
La ecuanimidad es poder ver el sufrimiento existente en las dos partes de un conflicto.
La ecuanimidad es estirar un poco más la mano y tocar a esa otra que no está lejos para juntos encontrar la paz.